La visión, junto con el oído, son los sentidos que más se ven afectados con el paso de los años. ¿Cuáles son los principales problemas de visión con los que nos encontramos en la tercera edad?
La vista se resiente al cumplir años, de tal manera que hay un alto porcentaje de personas mayores que padecen algún tipo de problema en la visión. Las limitaciones que ello provoca son de sobra conocidas, como el uso de gafas para realizar cualquier actividad, impedimento para poder conducir en casos graves, o tener que hacer visitas periódicas al especialista.
Las alteraciones visuales en los mayores son variadas, desde un simple y molesto lagrimeo a la incomodidad de una degeneración macular o cataratas. Problemas que requieren de un tratamiento continuo para poder garantizar una visión adecuada. La visión en un adulto mayor se deteriora de manera paulatina con el paso de los años, por lo que cuidar de este sentido es siempre una buena apuesta por la salud.
Causas de la pérdida de visión en adultos mayores
Normalmente la pérdida de visión en los adultos mayores puede venir determinada por una falta de cuidados a la hora de proteger este órgano. Retrasar la visita al oculista hace que estos problemas puedan agravarse. La falta de protección ante algunos agentes, como las pantallas de televisión o la radiación solar no ayuda precisamente a conservar el sentido de la vista.
Algunas enfermedades de la visión, como el glaucoma o las cataratas pueden ser consecuencia directa de la edad, pero es preciso de una corrección inmediata y un tratamiento para ser corregida.
Los problemas de visión no desaparecen solos ni tienen un diagnóstico bueno si no son corregidos.
No es posible revertir estos problemas, pero sí poder convivir perfectamente con ellos y llevar una vida normalizada. Aprender a rehacer la vida es una solución si los problemas de vista han hecho acto de presencia.En todo caso, la pérdida de visión por envejecimiento es un proceso natural y que no impide que se pueda disfrutar de una vida plena, bastará con poner la corrección necesaria para que la afectación sea la mínima posible.
Enfermedades de la visión propias de los adultos mayores

Las enfermedades de la vista propias de las personas adultas son variadas, pero se pueden concretar en estas que citamos a continuación.
- Presbicia o vista cansada: Afecta normalmente a partir de los 40 años, y aunque a esta edad no se puede considerar a nadie como un adulto mayor, sus efectos permanecen durante el resto de la vida. Se caracteriza por la dificultad para enfocar ciertos objetos, como letras pequeñas. El uso de gafas corrige el problema de forma eficaz.
- Glaucoma. Se trata deuna presión elevada dentro del ojo, concretamente en el nervio óptico, lo que provoca una visión dificultosa. Es una enfermedad de carácter progresivo y cuyas consecuencias se notan muy poco a poco, por lo que cuando queremos darnos cuenta, ya está en un estado avanzado. Las revisiones periódicas son siempre la mejor prevención.
- Cataratas. Los ojos no son más que unas lentes, pero estas pueden presentar unas manchas que hacen que la visión sea borrosa. Las cataratas se solucionan con una cirugía de carácter local y que prácticamente no precisa de un postoperatorio complejo, dando buenos resultados.
- Degeneración macular. Tiene una alta afectación en adultos mayores de 60 años, y es la degradación de la mácula del ojo, en la retina. Impide ver nítidamente objetos con detalle, y afecta principalmente a actividades como la conducción, la lectura o la costura. La degeneración de la mácula precisa de un tratamiento continuado y no es posible ser revertida.
- Lagrimeo. Se trata de el exceso de lágrimas en momentos como el exceso de luz o cambios brusco en sus condiciones o con las alteraciones de temperatura. El lagrimeo puede ser signo de algún problema mayor, como una obstrucción en el conducto lagrimal o de una infección.
- Puntos flotantes. esta alteración aparece incluso en buenas condiciones visibilidad, y consiste en una visión con algunas motas que parecen flotar. Si persisten y son frecuentes conviene acudir al especialista, ya que pueden ser signo de un desprendimiento de retina, un problema médico de gran calado.
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Qué hacer en caso de problemas de visión
Convivir con estos inconvenientes es posible, bastará con realizar algunos cambios para que podamos llevar una vida normalizada, en la que los problemas de visión no supongan un inconveniente.
- Utilizar objetos adaptados a nuestra visión. Por ejemplo, un teléfono móvil con letras grandes y de colores destacados para que sea más fácil su uso.
- Instalar detectores de movimiento en las habitaciones. Permite que se activen las luces de las estancias en las que accedemos, evitando tropezar y caminar a oscuras. Una caída en un adulto mayor puede tener graves consecuencias, aunque sea en casa.
- Usar las opciones de dictado de ordenadores y teléfonos. Permite poder escribir con reconocimiento de voz, de tañ forma que el dispositivo es el que escribe lo que le dictamos. Evita un uso excesivo delante de la pantalla y tener que dedicar tiempo a escribir. Igualmente usar opciones de alto contraste en estos aparatos.
- Descansar de la televisión. Los adultos mayores suelen pasar muchas horas delante de la pantalla, cosa que no es nada positiva. Por ello, comenzar a hacer otras actividades de exterior es una buena manera de descansar la vista.
- Señalizar puntos peligrosos del hogar. Si existe un escalón peligroso una buena medida para evitar accidentes es marcarlo con una cinta adhesiva de color vistoso. Puede adquirirse en ferreterías y si bien no son estéticas, evitan caídas y accidentes.
- Acudir con un especialista. El órgano de la visión necesita de continuos cuidados y supervisión, por lo que nunca dejar pasar este tipo de citas. De hacerlo quizás puede ser demasiado tarde más adelante.